El 5 de octubre de 2008 los electores brasileños elegirán alcaldes y concejales en 5.560 municipios. En las ciudades que poseen más de 200 mil electores, habrá segunda vuelta entre los dos candidatos más votados el 26 de octubre.

El 5 de octubre de 2008 los electores brasileños elegirán alcaldes y concejales en 5.560 municipios. En las ciudades que poseen más de 200 mil electores, habrá segunda vuelta entre los dos candidatos más votados el 26 de octubre.

Las elecciones municipales se realizan cada 4 años. En 2004 había 119.821.569 electores aptos a votar en 359.326 secciones electorales, distribuidas en 5.563 municipios. El electorado total era un poco mayor (121.391.630), porque los electores del Distrito Federal (1.510.709, que viven en Brasília y en las llamadas ciudades-satélites) y los electores residentes en el exterior (59.352) no participan en las elecciones municipales.

En 2004 había 68 ciudades con más de 200 mil electores. En 60 de estas ciudades, el electorado variaba entre 200 mil y un millón de personas. Ocho municipios poseían en 2004 más de 1 millón de electores: São Paulo (7.771.503), Rio de Janeiro (4.414.090), Belo Horizonte (1.680.169), Salvador (1.585.346), Fortaleza (1.361.957), Curitiba (1.179.223), Recife (1.030.769) y Porto Alegre (1.005.998 electores).

El electorado brasileño por Estado y número de municipios, en las elecciones de 2004, era el siguiente:

Acre – 387.657 electores en 22 municipios

Alagoas – 1.769.250 electores en 102 municipios

Amazonas – 1.660.217 electores en 62 municipios

Amapá – 328.577 electores en 16 municipios

Bahia – 8.954.998 electores en 417 municipios

Ceará – 5.137.253 electores en 184 municipios

Espírito Santo – 2.236.176 electores en 78 municipios

Goiás – 3.610.635 electores en 246 municipios

Maranhão – 3.745.493 electores en 217 municipios

Minas Gerais – 13.281.087 electores en 853 municipios

Mato Grosso do Sul – 1.492.702 electores en 78 municipios

Mato Grosso – 1.836.140 electores en 141 municipios

Pará – 3.979.643 electores en 143 municipios

Paraíba – 2.468.429 electores en 223 municipios

Pernambuco – 5.651.120 electores en 185 municipios

Piauí – 1.987.040 electores en 223 municipios

Paraná – 6.907.327 electores en 399 municipios

Rio de Janeiro – 10.515.216 electores en 92 municipios

Rio Grande del Norte – 2.024.288 electores en 167 municipios

Rondônia – 951.813 electores en 52 municipios

Roraima – 214.659 electores en 15 municipios

Rio Grande do Sul – 7.543.188 electores en 496 municipios

Santa Catarina – 3.996.827 electores en 293 municipios

Sergipe – 1.243.591 electores en 75 municipios

São Paulo – 27.055.014 electores en 645 municipios

Tocantins – 843.229 electores en 139 municipios.

(Datos extraídos de http://www.tre-ms.gov.br/noticias/noticia634.html)

Los partidos políticos tienen hasta el día 5 de julio para inscribir sus candidatos y registrar sus coligaciones. Los siguientes partidos están aptos a disputar las elecciones de 2008:

PCO – Partido da Causa Operária

PCB – Partido Comunista Brasileiro

PC del B – Partido Comunista do Brasil

PDT – Partido Democrático Trabalhista

PFL – Partido da Frente Liberal

PHS – Partido Humanista da Solidariedade

PL – Partido Liberal

PMN – Partido da Mobilização Nacional

PMDB – Partido do Movimento Democrático Brasileiro

PP – Partido Progressista

PPS – Partido Popular Socialista

PRONA – Partido da Reedificación da Ordem Nacional

PRTB – Partido Renovador Trabalhista Brasileiro

PSB – Partido Socialista Brasileiro

PSC – Partido Social Cristão

PSDB – Partido da Social Democracia Brasileira

PSDC – Partido Social Democrata Cristão

PSL – Partido Social Liberal

PSOL – Partido Socialismo e Liberdade

PSTU – Partido Socialista dos Trabalhadores Unificado

PT – Partido dos Trabalhadores

PTB – Partido Trabalhista Brasileiro

PTN – Partido Trabalhista Nacional

PV – Partido Verde

(Fuente: http://www2.camara.gov.br/outrosportais/partidosbrasileiros.html).

De estos 24 partidos, 11 integran la base de apoyo del gobierno Lula. Cada uno de los 27 gobiernos estaduales es apoyado por coligaciones, y los mismos partidos que están juntos en el gobierno federal (por ejemplo, PT y PMDB), son adversarios en un estado y aliados en otro.

De este modo, habrá alianzas de todos tipos en las elecciones municipales, y las más relevantes, que indicarán tendencias y proyectarán escenarios futuros, son las que se realizarán en las 27 capitales de estados, en las 68 ciudades con más de 200 mil electores y en las ciudades que retransmiten el programa electoral gratuito de TV.

La legislación brasileña prevé, a partir de 19 de agosto, la divulgación de propaganda electoral gratuita a través de radios y televisiones. La de mayor impacto es aquella divulgada por la televisión, pero ésta sólo se trasmitirá en aquellas ciudades que poseen empresas generadoras de imágenes. Esto hace que el proceso electoral en curso en esas ciudades gane una importancia regional, una vez que la campaña es vista por los habitantes de las ciudades próximas, que no disponen de generadora de televisión y por lo tanto no tendrán horario electoral gratuito de TV en su propia ciudad.

Pensando en ello, la Comisión Ejecutiva Nacional del PT deliberó que, en el caso de las capitales de estado, ciudades con más de 200 mil electores y ciudades que transmiten horario electoral gratuito de TV, eventuales alianzas con partidos que están fuera de la base de apoyo al gobierno deben considerarse como excepciones, que serán debatidas y deliberadas en encuentro municipal, refrendadas por la Ejecutiva Estadual y obligatoriamente aprobadas por la Comisión Ejecutiva Nacional del PT.

En documento aprobado el día 24 de marzo, el Directorio Nacional del PT evaluó que va a disputar las elecciones municipales de 2008 en una coyuntura favorable: “Brasil ingresa en un nuevo ciclo de desarrollo. Son cuatro años consecutivos de crecimiento sustentado, serie que alcanzó la marca de 5,4% del PIB en 2007. Crecimiento impulsado por el aumento de los ingresos familiares, la recuperación del salario mínimo, la generación de millones de empleos formales y la aplicación de fuertes políticas públicas claramente volcadas hacia la inclusión social y económica de las parcelas más pobres de la población brasileña”.

“El PT y el gobierno del presidente Lula sacaron el país de la situación de pre quiebra a la que había llegado después de ocho años bajo el mando del PSDB y del PFL (actualmente Demócratas). Recuperamos la capacidad de inversión y, con el PAC (Programa de Aceleración del Crecimiento), devolvimos al Estado su papel de inductor del crecimiento, invirtiendo la lógica neoliberal que predominó en la Era de Cardoso”.

“Con estas y otras acciones, el gobierno del presidente Lula y el PT hicieron realidad una de sus principales banderas históricas: la construcción de un nuevo modelo de desarrollo para el país, con fuerte participación del Estado, distribución de ingresos y volcado a un mercado de consumo de masa”.

“La continuidad de este proyecto transformador ha sido asegurada, en cierta medida, por la coalición de partidos que le da sustentación y estabilidad política al gobierno Lula – lo que nos plantea el desafío de establecer relaciones con esos partidos sin perder de vista el fortalecimiento del PT”.

La popularidad del gobierno federal brasileño hará que muchas candidaturas, incluso las lanzadas por la oposición, eviten chocar frontalmente con Lula. Por otra parte, esto significará que el PT no será el único Partido que disputará los dividendos positivos de la administración federal.

Los principales objetivos del PT en las elecciones de 2008 son los siguientes: “reelegir sus actuales alcaldes y alcaldesas, ampliar el número de ciudades gobernadas por el partido y aumentar su participación en gobiernos locales administrados por lemas aliados”. El Partido también pretende ampliar su participación en los Legislativos Municipales.

El Partido considera que “en el centro de los debates estarán temas relacionados con los problemas de los municipios”, para los cuales el partido “debe presentar programas y proyectos municipales consistentes, en base a la percepción de la realidad local”.

Al mismo tiempo, el PT dice que no hay que “perder de vista lo que realmente está en juego en las elecciones de este año. Habrá una disputa municipal con la mirada en el futuro. En este sentido, se trata de una disputa de carácter local, pero con proyección en las disputas futuras. El crecimiento del PT en estas elecciones acumula fuerza para la disputa electoral.

Por esa razón, el Directorio Nacional del PT aprobó una política de alianzas que deja claro que están en juego proyectos de país diferentes y antagónicos: “nuestro proyecto es completamente opuesto al del PSDB y al del DEM, antes denominado PFL, que llevaron el país a la bancarrota económica, privatizaron el Estado, generaron desempleo en masa y aumentaron el universo de la exclusión económica y social”.

Por lo tanto, “os candidatos del PT deben alinear el discurso local con las grandes cuestiones nacionales, comparando los éxitos del gobierno Lula con el fracaso del PSDB y el DEM (ex PFL), mostrando los avances en los pactos federativo y municipalista, como el aumento de los repases del FPM y las inversiones del PAC en las ciudades, muchas de ellas gobernadas por oposicionistas, entre muchas otras acciones. El gobierno Lula es el gobierno municipalista. Y la nacionalización de la campaña debe realizarse en defensa de los proyectos de inversiones sociales y de infraestructura en las ciudades”.

“Aliar ese discurso con los temas municipales es de fundamental importancia. El PT posee una larga tradición de gobiernos municipales creativos y volcados a mejorar la vida de la población, con varios proyectos exitosos premiados internacionalmente. El modo petista de gobernar ya se convirtió en una fuerte marca en campañas electorales. Teniendo en cuenta cada realidad, debemos subrayar las experiencias exitosas en las administraciones petistas que presentaron programas de gobierno en base a los siguientes ejes: comunicación, participación social, ciudadanía cultural y control social; desarrollo local sustentable; políticas sociales; gestión ética, democrática y eficiente; planificación, territorio y financiación de los municipios, y la cuestión de género, raza y orientación sexual.“

El PT considera asimismo que la alianza con los movimientos sociales es estratégica: “el partido tiene una fuerte conexión con las organizaciones populares y debe traerlas a la campaña, respetando su autonomía. Las campañas electorales pueden y deben servir para movilizar los movimientos sociales y valorizar el militante, ofreciendo argumentos para la disputa ideológica y la defensa de las propuestas de nuestros candidatos”.

La política de alianzas del PT en 2008 obedecerá, por lo tanto, a los siguientes criterios:

1) alianzas programáticas con base en las propuestas de gobierno democrático y popular;

2) defensa del gobierno Lula;

3) candidaturas con perfil democrático y principios éticos.

El Partido dos Trabalhadores buscará construir alianzas preferenciales con el PCdoB, PDT, PSB, partidos de izquierda y tradicionales aliados del PT, en el sentido de conformar un bloque de izquierda para enfrentar la derecha conservadora. El PMDB, por su importancia en la coalición del gobierno Lula y por su capilaridad, es considerado por el PT como otra posibilidad de alianza, a pesar de su diversidad en los municipios. Además de estos, el PT entrará en contacto con todos los partidos de la base aliada al gobierno.

Eventuales alianzas con partidos que están fuera de la base de apoyo al gobierno Lula deben tratarse como excepciones, respeto de las cuales puede caber decisión final de la Dirección Nacional del Partido.

En la mayor parte de las ciudades estratégicas, no habrá alianzas del PT con PSDB y DEM; una de las excepciones más importantes, hasta ahora, es Belo Horizonte, capital del estado de Minas Gerais.

El PT conquistó la alcaldía de Belo Horizonte en 1992 y eligió a Patrus Ananias (actual ministro de Desarrollo Social de Lula). Perdió las elecciones de 1996 para Célio de Castro, del Partido Socialista Brasileiro, pero integró su gobierno por medio de algunos secretarios, entre los cuales Luiz Dulci (actual ministro jefe de la Secretaría General de la Presidencia del gobierno Lula). En 2000, Célio de Castro se reeligió y su vice alcalde fue Fernando Pimentel, del PT. Pimentel fue electo alcalde en las elecciones de 2004.

Actualmente, el alcalde Pimentel propone que el PT apoye un candidato a alcalde vinculado al Partido Socialista Brasileiro. Lo que ocurre es que el nombre del PSB recibe el apoyo explícito de Aécio Neves, gobernador de Minas y uno de los pre candidatos del PSDB a la presidencia de la República en la sucesión de Lula, en 2010.

La alianza propuesta es presentada por los medios y sus protagonistas como una señal de aproximación estratégica entre miembros del PT y el PSDB. Para una gran parte del PT, esta aproximación es una quimera, que sirve solamente para fortalecer las aspiraciones presidenciales de Aécio Neves (nieto de Tancredo Neves, último presidente electo por el Colegio Electoral, en 1985, que murió antes de asumir el cargo, dando lugar a José Sarney, que gobernó el país hasta que asumió Fernando Collor).

Un ejemplo de tensión entre el PT y el PSDB está en los ataques que la bancada oposicionista realiza en contra de Dilma Rousef, ministra de la Casa Civil de Lula, gestora del Plan de Aceleración del Crecimiento y señalada como una de las pre candidatas del PT a la Presidencia de la República.

Ese desentendimiento tiene poca importancia para el país, si se lo compara con la importancia de la disputa entre el ministerio de Economía y el Banco Central del gobierno Lula, en torno a la tasa de interés, la política cambiaria y los ajustes en el presupuesto nacional. Temas de la próxima mirada sobre Brasil del Periscopio Internacional.