2007 empieza agitado! La ceremonia de asunción al cargo de Lula, las elecciones en el Congreso, los gobernadores y la seguridad pública y el III Congreso del PT son los temas de la session “Una mirada sobre Brasil”

anchor
2007 empieza agitado
Elecciones en el Congreso
Gobernadores y Seguridad Pública
III Congreso del PT


anchor
2007 empieza agitado

El año comienza con una agenda política intensa. El 1 de enero el presidente Lula asumió el cargo, así como los 27 gobernadores de los estados brasileños. Hasta fines de febrero la pauta debe ser la composición del nuevo gobierno y la elección de las presidencias de la Cámara de Diputados y del Senado. Al inicio de febrero el PT conmemora sus 27 años de vida y da los primeros pasos hacia su III Congreso, que se realizará los días 6, 7 y 8 de julio.

Durante la ceremonia de asunción al cargo, Lula prometió en pronunciamiento a la nación, en el Parlatorio (Plaza de los Tres Poderes, en la capital del país) más esfuerzos para asegurar un crecimiento económico mayor que el que se obtuvo en su primer mandato. Mencionó el paquete de medidas elaboradas para “destrabar” la economía, así como las reformas necesarias, como la tributaria, para complementar los cambios. “Este país tendrá un vigoroso crecimiento. Pero no un crecimiento como el que tuvimos en otra época, en que el país crecía y el pueblo seguía pobre, el país crecía y no se distribuía el resultado de ese crecimiento. Tenemos que tener conciencia de que el país necesita crecer, pero lo que también tiene que crecer, de forma concomitante con el crecimiento de la economía, con el crecimiento de la industria, con el crecimiento de la agricultura, es la mejora de la calidad de vida de nuestros niños, de nuestras mujeres, de nuestros jóvenes”, dijo Lula (ver el discurso completo).

En el Congreso Nacional, el presidente Lula dijo que su reelección fue una decisión libre y consciente del pueblo, sin la influencia de “capataces”. Para él, la reelección significa el deseo de cambiar de la población, reprimido hace años. “Este pueblo constituye la verdadera opinión pública del país, que algunos pretendieron monopolizar” (ver discurso completo de Lula en el Congreso Nacional).

Para el presidente Lula, los verbos acelerar, crecer e incluir regirán Brasil en estos próximos cuatro años. “Los efectos de los cambios deben ser sentidos rápida y ampliamente. Vamos a destrabar Brasil para que crezca e incluya de forma más acelerada”, aseguró durante su discurso en el Congreso.

Incluso antes de asumir el cargo, en diciembre de 2007, Lula pretendía anunciar un paquete de medidas económicas – el Programa de Aceleración del Crecimiento (PAC) – para estimular el crecimiento del país. El anuncio fue postergado para fines de enero.

La única medida concreta del paquete que se dio a conocer todavía en 2006 se hizo pública a través de un debate del ministro de Economía, Guido Mantega, con algunos senadores, sobre política económica. Confirmó que el gobierno aumentará las inversiones en obras de infraestructura utilizando recursos que pagarían intereses de la deuda al “mercado”.

En el gobierno es pública la existencia de fuerzas que realizan una dura batalla para asegurar la pauta económica. Por un lado, los llamados desarrollistas, que defienden una política que asegure el crecimiento acelerado, rigor fiscal y control de la inflación, con generación de empleos y mantenimiento de las políticas sociales. En este campo se encuentran el ministro de Economía, Guido Mantega, y la ministra jefa de la Casa Civil, Dilma Rousseff.

Por otro, están aquellos que defienden la ortodoxia económica del ex ministro de Economía, Antonio Palocci, y del presidente del Banco Central, Henrique Meirelles. Durante los últimos cuatro años Brasil mantuvo una política de elevados intereses y superávit primario que resultaron en un crecimiento mediocre, por debajo de los promedios mundiales.

Lula asumió el segundo mandato sin alterar hasta ahora la composición de su ministerio. Se prevé que los cambios ocurrirán al inicio de febrero. Hasta entonces sólo hay especulaciones sobre si habrá un segundo mandato distinto o si se seguirá con la polémica entre los que defienden una política económica desarrollista y los que practican una política de intereses ortodoxa y pro capital financiero.

anchor
Elecciones en el Congreso

No son pocos los desafíos que el nuevo gobierno deberá enfrentar. Además de la nueva composición del ministerio – todavía no anunciado -, tendremos la elección de los nuevos presidentes de la Cámara de Diputados y del Senado.

El presidente de la Cámara Federal es el tercero en la línea de sucesión. Él asume el mando del país en la ausencia del presidente de la República y del vicepresidente. Además, el presidente de la Cámara controlará solo, en el 2007, un presupuesto de R$ 3.387 mil millones. Le cabe decidir si archiva o instala la comisión para analizar un eventual juicio de impedimiento del presidente de la República; define lo que será o no votado; también tiene el poder de archivar un requerimiento de una Comisión Parlamentaria de Investigación (CPI), y el suyo es el “voto de Minerva” en la Mesa Directora.

En el caso de la Cámara, dos nombres de la base gubernista compiten por el cargo: el diputado del Partido dos Trabalhadores, Arlindo Chinaglia, y Aldo Rebelo, del Partido Comunista do Brasil (PCdoB). La elección se llevará a cabo el 1 de febrero.

Si la disputa va al plenario de la Cámara, los partidos que conforman la base de sustentación del gobierno recelan que ocurra una especie de repetición del episodio que sucedió en 2005. En dicha oportunidad, la oposición aprovechó la brecha para imponerle una derrota al gobierno, por medio de la elección de Severino Cavalcanti, del Partido Progresista. En la primera vuelta de aquella elección, Luis Eduardo Greenhalgh, del PT, obtuvo 207 votos contra 124 de Severino y 117 de Virgilio Guimarães, también del PT. En la segunda vuelta, Severino venció con 300 votos, mientras que Greenhalgh obtuvo solamente 195.

Cabe recordar que la disputa entre Virgilio Guimarães y Greenhalgh no fue la causa de la derrota, sino el síntoma de un problema bastante más grave: la estrategia de la derecha de desgastar el gobierno y el Partido dos Trabalhadores junto a los sectores sociales que concluyeron en la victoria de Lula en el 2002.

Los ataques contra el PT pretendían acumular fuerzas para ganar la presidencia de la República en 2010, al mismo tiempo que operaban para derrotar el PT en 2006. Después de construir esta estrategia, la derecha, de forma articulada, empezó a construir en la sociedad un discurso antipetista, que resultó en una derrota política nacional del Partido, materializada sobre todo en los resultados electorales de São Paulo y Porto Alegre, en 2004. En 2005 esta derrota fue acompañada de la elección de Severino Cavalcanti para la presidencia de la Cámara de Diputados.

Severino renunció a la presidencia de la Cámara después que se reveló que recibía coima del concesionario de un restaurante en la Casa. Aldo Rebelo lo sucedió e intenta reelegirse este año.

El nombre del diputado Arlindo Chinaglia fue indicado por la bancada del PT en la Cámara – la segunda mayor bancada, con 83 diputados – y obtuvo el apoyo de la principal bancada de esta legislatura. El Partido do Movimento Democrático Brasileiro (PMDB), con 90 diputados de un total de 513, formalizó su adhesión a la candidatura del diputado del PT.

El líder del Partido da Social Democracia Brasileira (PSDB), Jutahy Jr., que coordina la bancada de los parlamentarios de este partido en la Cámara, anunció públicamente, después de una consulta telefónica realizada con la base de los congresistas de su partido, el apoyo de estos a la candidatura de Chinaglia.

La base de su argumentación fue el cumplimiento del principio de proporcionalidad de las bancadas. El PMDB, cuya mayor bancada tendría derecho a la presidencia, prefirió abandonar su derecho de lanzar un nombre y decidió formalizar el acuerdo con el PT, según el cual los dos primeros años (2007 y 2008) permanecerán al cargo del PT y el PMDB lanzará su propio candidato en el bienio 2009-2010.

El PSDB, que obtuvo la tercera mayor bancada, con 66 escaños, sería contemplado con la vicepresidencia de la lista de Chinaglia.

Con las nuevas adhesiones, la candidatura del actual presidente de la Cámara, Aldo Rebelo, redujo sus posibilidades de victoria. Rebelo cuenta con su base oficial – 13 parlamentarios del PCdoB y 27 del PSB -, y con apoyos dispersos de parlamentarios de otros partidos. También cuenta con la solidaridad de figuras como el ex presidente Cardoso, del PSDB, así como de liderazgos del Partido da Frente Liberal (PFL), como el ex senador Jorge Bornhausen y el senador Antonio Carlos Magalhães. El PFL justifica el acuerdo a Rebelo como una estrategia para dividir la base aliada.

Sin embargo el PSDB, con la adhesión de su bancada a Chinaglia, abre una crisis en el partido. Según el periodista Franklin Martins, la división interna en el PSDB va mucho más allá del tema de la composición de la Mesa de la Cámara. En el fondo, lo que está en juego es “el tipo de oposición que el PSDB desea hacer al presidente Lula o, en otros términos, el tipo de gobierno que el partido pretende ofrecer al país como alternativa al actual”.

Para el periodista, “la expresiva victoria de Lula en las últimas elecciones, manteniendo intacto su capital político y electoral después de un año y medio de ataques furiosos, puso la oposición frente al siguiente dilema: seguir con su táctica de choque frontal, apostando en el todo o nada, o trabajar para una distensión de la situación política”.

“El PFL ya tomó una decisión. Se va a mantener en la oposición extrema, lo que tiene sentido en el caso de un partido que salió muy debilitado de las elecciones y no tiene perspectiva de poder a corto plazo. Pero el PSDB, que controla los gobiernos de los dos estados más importantes del país y tiene dos nombres que pueden disputar la presidencia de la República en 2010, José Serra y Aécio Neves, no se puede dar al lujo de apostar todas sus fichas en la peor de las situaciones posibles. Tiene que extender puentes hacia importantes parcelas del electorado que votó en Lula, para atraerlo gradualmente. Por ello es necesario reducir la presión del ambiente”, asegura Franklin.

Según el periodista, el problema es que una gran parte del PSDB sigue presa al pasado o sigue teniendo como principal referencia política el electorado que votó, mientras Aécio y Serra están preocupados en poner una cuña entre el 61% de los electores del país que apoyaron a Lula, Cardoso, Alckmin y Tasso, de forma conservadora, parecen desear solamente mantener agrupado el otro 39%.

En el Senado, la presidencia podrá ser disputada entre dos senadores: el actual presidente, Renan Calheiros (PMDB), de la base del gobierno, y José Agripino Maia (PFL), de la oposición.

La composición de las bancadas favorece Calheiros, ya que tradicionalmente los senadores eligen como presidente un miembro de la mayor bancada – en el caso, la del PMDB. Sin embargo, los miembros del PFL argumentan que el criterio debe ser el de la mayor bancada electa – y no conquistada después de los tradicionales cambios de partido entre los parlamentarios.

La asunción al cargo de senadores suplentes modificó la composición de fuerzas de la Casa. El PMDB pasó a tener la mayor bancada, con 20 senadores, y superó el PFL, con el que disputaba el liderazgo. Pero en los últimos días el PFL perdió un representante y ahora tendrá una bancada con 17 nombres.

anchor
Gobernadores y Seguridad Pública

El mismo día que Lula también asumieron sus cargos los 27 gobernadores electos. 21 de ellos anunciaron cortes de gastos, suspensión y revisión de contratos, extinción de secretarías y reducción del número de asesores nombrados sin concurso.

Las medidas anunciadas por los gobernadores tienen varias motivaciones. En muchos estados, las medidas obedecen a una necesidad vital. Este es el caso, por ejemplo, de Rio de Janeiro, cuyas finanzas están totalmente desorganizadas. En otros, expresan la línea conservadora derrotada en las elecciones, la del ajuste fiscal y la subcontratación de los servicios.

Los gobernadores de oposición, como el del estado de São Paulo, José Serra, y el de Minas Gerais, Aécio Neves, ambos del Partido da Social Democracia Brasileira (PSDB), optaron por un discurso con un tono nacional. Los dos son fuertes nombres para disputar la presidencia de la República en 2010, por el PSDB.

Aunque niegue que las críticas al gobierno federal ya están relacionadas con la próxima elección, Serra deja claro que disputará la plaza del PSDB a la presidencia. Tan pronto asumió el cargo elaboró ocho decretos, entre ellos los que determinan la reevaluación de todos los contratos firmados anteriormente por el estado de São Paulo. El candidato del PSDB derrotado a la presidencia de la República, Geraldo Alckmin, comandó el estado de São Paulo desde 2001 hasta marzo del año pasado, y su campaña contra Lula se basó en su supuesta calidad de buen administrador.

El conjunto de decretos fue clasificado por el propio Serra como una especie de limpieza en las cuentas del Estado. El nuevo gobernador señaló problemas en la gestión Alckmin al hablar de un nuevo registro de empleados públicos e incluso admitió la posibilidad de que existan empleados fantasmas en la nómina de pago del Estado.

Este hecho refleja la disputa interna en el PSDB, en la cual Serra ya se presenta como candidato a la presidencia de la República en 2010.
Los gobernadores de la región Sudeste del país también se reunieron para demandarle al gobierno federal medidas de seguridad pública. Los gobernadores José Serra (São Paulo), Aécio Neves (Minas Gerais), Sérgio Cabral (Rio de Janeiro) y Paulo Hartung (Espírito Santo) – los dos últimos aliados de Lula – divulgaron una carta conjunta solicitando el aumento del número de agentes de las policía Federal y Caminera Federal en sus Estados y una mayor implicación de las Fuerzas Armadas en la represión al tráfico de armas en las fronteras nacionales, así como el final de la limitación de recursos para la seguridad pública.

A partir de este encuentro se instaló el Gabinete de Acción Integrada del Sudeste, cuya misión, a través de la integración de las policías, es la de facilitar una acción coordinada entre los cuatro estados en el área de seguridad pública.

Según el diputado Antonio Carlos Biscaia (PT-Rio de Janeiro), la primera iniciativa sobre este tema partió del presidente durante el discurso de asunción al cargo, en el que llamó la situación en ese estado de acto terrorista. “Creo que es importante esa unidad de acción entre los gobernadores ya que, con coordinación y apoyo del gobierno federal, se puede cuidar más de la seguridad de la población, no como disputa política, como sucedía en Rio de Janeiro”, dijo.

En el caso de São Paulo, el estado fue sorprendido en el mes de mayo del año pasado con los ataques de la facción criminal Primeiro Comando da Capital (PCC). El resultado de las acciones del PCC y de la reacción de la policía fue la muerte de más de 160 personas, entre policías, agentes de seguridad y civiles (inocentes y presuntos criminales).

El PSDB gobernó São Paulo durante 12 años y, según datos de la bancada del PT en la Asamblea Legislativa ‘paulista’, se dejó de aplicar R$ 1,5 mil millones en el área de la salud y R$ 4 mil millones en el sector de la educación. El gobierno de São Paulo, bajo el mando de Geraldo Alckmin, dejó de ejecutar en los últimos años más de R$ 615 millones en el área de seguridad pública.

En el caso de Rio de Janeiro, ataques sincronizados de facciones criminales ocasionaron la muerte de 11 personas y la reacción policial mató siete supuestos traficantes, llegando así a 18 asesinatos que generaron pánico en la capital a fines de diciembre de 2006. Siete pasajeros carbonizados en un autobús interestadual incendiado, dos policías militares y dos otras personas murieron durante esos ataques criminales.

Según el coordinador del Movimiento Nacional de Derechos Humanos, Ariel de Castro Alves, el crimen organizado aprovecha el escenario de desentendimiento entre los gobernantes, la corrupción presente en las instituciones que tendrían que combatir el crimen, las transiciones en los gobiernos y el receso de inicio del año e incluso del turismo de verano para imponer el terror y después negociar una tregua. “Uno de los ingredientes que motivó la actuación del crimen organizado, además de algunos otros arriba mencionados, fue el periodo preelectoral, cuando los gobiernos se sienten totalmente perdidos y todo es motivo para disputas y ataques recíprocos. En Rio de Janeiro actúan las milicias criminales con la connivencia de la policía, actuaron los grupos de exterminio, también con la complacencia de las fuerzas policiales”, escribió a la agencia de noticias Carta Mayor.

Para el profesor de Sociología de las Facultades Integradas Hélio Alonso (Facha), Gilson Caroni Filho, “debitar el terror vivido por la población de Rio de Janeiro o de cualquier otro centro urbano a la ausencia de una legislación penal más rigurosa o a dinámicas recurrentes en momentos de cambio de mando en el área de seguridad, nos lleva a olvidar un dato significativo que constituye la misma esencia de nuestra formación social. La tragedia de la seguridad pública es la tragedia de un Estado que, por nunca haber sido plenamente democrático y de derecho, falló en el combate al crimen en la misma medida en que fue incapaz de implementar políticas públicas de inclusión”.

La integración de las fuerzas de combate al crimen en el estado es una necesidad incuestionable. La ayuda de la Fuerza Nacional de Seguridad y la planificación de acciones conjuntas de los gobernadores del Sudeste también son importantes. “Pero si no se implementan políticas públicas que contemplen los que nunca fueron atendidos por el Estado en sus demandas por salud, educación, saneamiento y justicia, haremos eco al argumento derechista que preconiza la acción represiva como panacea universal”, asegura Caroni.

Ampliar la presencia de la defensoría pública y, como lo señaló Flavio Aguiar en artículo reciente en la revista Carta Mayor, implementar política nacional para jóvenes infractores, sin caer en la trampa de la extensión de la responsabilidad criminal, son puntos fundamentales para una agenda exitosa.

La ministra jefa de la Casa Civil, Dilma Rousseff, dijo que el gobierno federal aumentará el presupuesto para el sector este año. “Estamos previendo la ampliación de los recursos para seguridad pública frente a la prioridad que el gobierno estableció”, declaró. Agregó que el monto previsto en el presupuesto de 2007 ya es mayor y debe aumentar aún más con la liberación de créditos adicionales.

Levantamiento divulgado por el Ministerio de la Justicia muestra que en 2006 el Fondo Nacional de Seguridad Pública recibió R$ 354 millones del presupuesto y R$ 112 millones en créditos adicionales, lo que representa un total de R$ 466 millones. Solamente en el presupuesto se prevén para este año R$ 462,6 millones.

anchor
III Congreso del PT

El Partido dos Trabalhadores lanza el 10 de febrero el III Congreso del partido, que se realizará los días 6, 7 y 8 de julio de este año. El acto se llevará a cabo en Salvador, Bahia, durante el 27º aniversario del PT. El III Congreso se basará en tres temas: el Brasil que queremos, el socialismo del PT, PT concepción y funcionamiento.

El 9 de febrero la Secretaría de Relaciones Internacionales organizará un seminario sobre los desafíos de la izquierda latinoamericana y caribeña, para el cual serán invitados todos los partidos amigos del PT. La noche de este día será realizada una cena con la presencia de Lula. El 10 de febrero se realizará la reunión del directorio nacional del PT y cuando finalice se hará el lanzamiento oficial del III Congreso. La noche del día 10 habrá una gran fiesta popular para conmemorar los 27 años del PT.

Habrá dos tribunas de debate del III Congreso. La primera será mensual, en papel, bajo la forma de separata de la revista Teoria e Debate. La segunda será semanal, electrónica, con el mismo modelo de la TD Urgente, que fue al aire en la época del PED.

Además de ello, el partido y la Fundación Perseo Abramo realizarán por lo menos doce grandes seminarios nacionales, posiblemente en las siguientes capitales: Porto Alegre, Rio de Janeiro, Belo Horizonte, São Paulo, Recife, Aracaju, Fortaleza, Teresina, Rio Branco, Belém y Distrito Federal. Cada uno de estos seminarios contará con tres mesas, una para cada tema del Congreso. Los seminarios serán ampliamente divulgados en conjunto por la Agencia Carta Mayor y la prensa democrática.

Entre 25 de junio y 5 de julio, la dirección nacional organizará por lo menos tres debates entre los firmantes de los proyectos de resolución. Cada uno de estos debates será ampliamente divulgado vía Internet, radio, televisión y prensa.

`